domingo, 1 de noviembre de 2009

Breve reseña histórica del Equipo Pastoral Paraguayo en Argentina EPPA

Entre los miles de migrantes paraguayos que se volcaron hacía Buenos Aires en los años 60, vinieron también jóvenes trabajadores que pertenecían a organizaciones de la Iglesia, como la JOC (Juventud Obrera Católica) por ejemplo. También ex seminaristas y sindicalistas. Durante esta década nació un grupo de la JOC de migrantes paraguayos, y se fundó el Movimiento Sindical Paraguayo.

Como se puede vislumbrar existían organizaciones preocupadas en servir a los compatriotas en distintos campos, pero se notaba un claro. Y ese claro, ese vacío se comienza a llenar en la Semana Santa del año 1970, cuando un grupo de 16 laicos se reúnen con el Padre Oliva, en una jornada de reflexión. El tema principal: “¿Vale la pena seguir siendo cristiano en la migración?”. Intensos días de reflexión, a la luz del Evangelio y los documentos de la Iglesia sobre las migraciones. Se profundizó en la realidad como migrantes, una mayoría de campesinos que en ese entonces se habían convertidos en obreros en una gran ciudad. Esas jornadas tuvieron como resultado el convencimiento de que más que nunca debían poner en práctica la fe en Dios, al servicio de los hermanos. Nace en ese entonces el EPPA( Equipo Pastoral Paraguayo en Argentina).

Objetivos del EPPA:

En su Plan Pastoral tiene marcados algunos compromisos básicos que hacen justamente a los objetivos y que cada miembro responsable, se compromete frente a la asamblea a cumplirlo en una celebración especial por un periodo de un año y así sucesivamente cada año:

1- Acompañar la migración de nuestro pueblo, iluminándola con una visión completa del mensaje cristiano, que partiendo de las expresiones y centro de interés de nuestra rica religiosidad popular, nos impulsa a transformar nuestras vidas y el medio ambiente.
2- Nos ayudaremos a tomar conciencia de nuestra identidad como paraguayos, superando todo complejo de inferioridad y facilitando así una integración digna y activa en nuestra segunda patria, sin dejar de fomentar la fraterna solidaridad con todos los otros hermanos latinoamericanos, superando de este modo el nacionalismo mezquino y aprendiendo a vivir, por el contrario, con una mentalidad de hombres nuevos.
3- Nos situaremos con una conciencia critica ante nuestra realidad de emigrantes, esforzándonos constantemente por superar lo negativo y aprovechar lo positivo de esta situación, sabiendo que esto nos prepara ser más útiles en nuestra patria si el retorno se hace posible.
4- Como comunidad enviada por Cristo entre nuestros hermanos dispersos, preferentemente los más débiles y necesitados, buscaremos siempre ser más fieles a esta misión, iluminando la realidad de la migración y nuestra vida personal, familiar y de Equipo con la palabra de Dios, la Celebración de los Sacramentos y el estudio serio, que nos impulsen a ser testigos coherentes de aquellos que creemos.
5- Convocaremos para esta labor misionera a todos los cristianos que quieran ayudarnos, teniendo presente que los agentes principales en esta misión somos los mismos migrantes paraguayos.

La misión anual:

El EPPA, un pequeño grupo de laicos, un sacerdote y algunas religiosas, había nacido al servicio de una gran tarea: animar la fe cristiana de miles de paraguayos situados en Capital Federal y Gran Buenos Aires. Esta porción del pueblo paraguayo en tierra argentina con sus problemas de desarraigo y marginación, marcó no solo el estilo si no también el contenido de la acción pastoral. La misión nace como propuesta a una necesidad concreta: acompañar a los connacionales . Su puesta en marcha en 1973, luego de asimilada la idea fue el fruto de variados esfuerzos.
La primera misión pastoral, modesta en su extensión inauguraba sin pretenderlo explícitamente una nueva época en la historia pastoral de América Latina. El órgano colegiado de la Iglesia de un país asume como deber, asistir pastoralmente a los connacionales emigrados. Esta misión debía adecuarse a los acontecimientos de la migración. En este contexto la misión anual sigue siendo un intento serio, tangible de acompañamiento cristiano a los paraguayos migrantes.

Este año 2009 estamos preparando las XXXVII misión, con el Tema-Lema “CRISTO Y MARÍA NOS LLAMAN A CONSTRUIR UN SOLO PUEBLO” contando con mas de 1.500 agentes pastorales distribuidos en mas de 350 comunidades de bases, con 4 Arquidiócesis: Capital Federal, La Plata, Mercedes-Lujan y Rosario Santa Fe y con 12 Diócesis: Quilmes, Avellaneda- Lanús, Loma de Zamora, San Justo, Laferrere, Morón, Merlo-Moreno, San Martín, San Miguel, San Isidro, Zarate –Campana y Mar del Plata. Todos tenemos muy presente, que nuestra madre Virgencita de Caacupé emigra con nosotros y nos acompaña siempre. Desde hace 37 años que celebramos su día con una misa de acción de gracia (Misa Guasú) el domingo posterior mas cercano al 8 de diciembre que este año 2009, será el domingo 13 de diciembre 11 hs. en el Santuario de la Virgen de Lujan.

Diác. Ricardo Irala González
Teléf.: 02320-434570 – Cel.: 1561567812
riciralagonzalez@hotmail.com

En el siguiente Nº sabremos el sentido de Caacupé en Lujan este año
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