El periodista y escritor paraguayo Julio Benegas Vidallet presenta este viernes 23 de abril su libro La vida y la bronca en el Deportivo Paraguayo, Piedras 1676, San Telmo, Buenos Aires capital.
La obra contiene artículos publicados en diversos medios, principalmente en ABC Color, el diario donde trabaja. Sus textos abordan cambios en la sociedad paraguaya en los últimos 30 años. Además de estos artículos reunidos, el libro aporta un ensayo sobre el carácter del Estado paraguayo. Julio Benegas Vidallet es autor del libro de narraciones Tereré en la Plaza (2002), la novela corta Soledad (2004), coautor de Anales Urbanos (2007) y Las razones de la caída del Partido Colorado (2008). Ganó el premio internacional de periodismo Lorenzo Natalí, otorgado por la Federación Internacional de Periodistas y la Comisión Europea, por sus escritos sobre el servicio militar en Paraguay. Fue dos veces secretario general del Sindicato de Periodistas del Paraguay.
Julio, contesta unas preguntas para Ape Paraguay imaginando una charla en la plaza del microcentro, tomando tereré mientras alrededor se observa a la gente corriendo para llegar al trabajo.
-¿Hay cosas que quisiste decir como periodista y no dijiste desde el lugar dónde trabajás?
-Todo lo he dicho acá como periodista, dirigente sindical, humano, esencialmente humano que mira y vive el mundo desde las plazas, las luchas obreras, el amor por la vida y el eterno sueño de no mendigar el pan ni la alegría.
-¿Cómo es ser un militante y trabajar en el periódico que más tergiversa la información para decir lo que a su interés económico conviene?
-Uy, es un eterno reinventarse para no salir a disparar misiles de salva contra los patrones. A la espera, tal vez, de los pregones, trovadores, compuestores y los miles de deshauciados de este país. Al espera o en la batalla por el pulmón de nuestra historia. Es un eterno contenerse a la espera de algo mayor donde podamos contenernos y romper el cerco de la mezquindad, de gente que cree que el mundo es el reflejo de sus infames intereses. El orden particular, extendidamente stronista, es perverso y mezquino. Hay gentes que quieren dictar desde su delirio lo que la gente tiene que creer, opinar, conocer. Gente que en micrófonos, gacetillas y panfletos quieren negar la existencia del sol. Y usan el chaque como su principal herramienta. Así quieren corrernos del debate necesario sobre el agua, la comida, las tierras. Hoy, el discurso mediático hegemonizado por ABC es más, más, más stronismo que intentó construir una sociedad sobre la base del miedo al otro, toda diversidad es peligrosa, todo planteo contrario a ese orden: latifundista, agroexportador, importador, reexportador, es peligrosa. Es el chaque el único instrumento de los ricos de este país.
-¿Cuál es el objetivo de lanzar el libro en Buenos Aires? Porque, conociéndote...nadie podría creer que quisieras ganar dinero
-Buenos Aires, Resistencia, Ciudad del Este, Tava Guaraní, Plaza Italia, "si me invitan a la farra voy". La idea es encontrarnos con la gente que hace cosas, reconocernos, recrearnos. Soy militante, esencialmente, y como tal no imagino lo escrito como patrimonio personal, de referencia personal. La palabra compartida todavía me fascina. El encuentro todavía me fascina. Si se puede dar ese milagro de leer nuestras cosas, recitarnos nuestros poemas, explicarnos el mundo desde nuestros oficios, ahí vamos. La idea en Buenos Aires, este 23 de abril, en el Deportivo Paraguayo es la misma. Encontrarnos, escuchar música, recitar poemas, encontrarnos en torno de un librito, una excusa, una excusa. El dinero va y viene, pero si vendemos algo, seguro que nos alcanzará para la noche.