Sergio Acosta, dueño de una funeraria y trabaja en el Canal 4 de La Matanza (Foto: Archivo APE) Paraguayo, dueño de una funeraria ofreció traslado gratuito de restos de Arsenio Erico sin costo, pero el Estado igual pagó.
Un hombre, de nombre Sergio Acosta, escribió a APE un email en dónde lamentaba que “estén gastando plata del Estado innecesariamente”, refiriéndose al costo que se habría pagado por los traslados de los restos de Arsenio Erico, el saltarín rojo, uno de los futbolistas más importantes del fútbol, quien muriera en Argentina.
“Como yo me dedico a hacer traslados de fallecidos al Paraguay, en su momento envié una propuesta de realizarlo sin cargo, totalmente gratis”, relata Acosta, quien adjunta una nota de la Abogada Rossana González de dos Santos por instrucciones de Salustiano Salinas Montanía que expresa cuanto sigue: “Con mucha satisfacción he tomado conocimiento, a través del Señor Vicepresidente, Don Federico Franco, de su gentil ofrecimiento de realizar el traslado sin costo de los restos de nuestro incomparable deportista Arsenio Erico. Dicho ofrecimiento, que gratamente lo aceptamos, constituye para los paraguayos una muestra más de la estima, cooperación y solidaridad que siempre ha caracterizado a nuestros pueblos.En breve lo contactaremos en los números telefónicos consignados en su comunicación vía correo electrónico, a fin de coordinar los trámites necesarios para el mencionado traslado. Resta expresar mi más sincero agradecimiento y transmitir, asimismo, el de todas las personas que se han sumado y hecho posible el logro de este proyecto. Con aprecio sincero, reciba un fuerte abrazo”.
Por lo que puede entenderse del email del señor Acosta, finalmente prefierieron pagar los costos del traslado antes que tomar su ofrecimiento de trasladar los restos de Arsenio Erico en forma gratuita.
No se ha dado a conocer el costo total del traslado del ídolo futbolista. Pero se sabe que la comitiva que "trabajó" empleó el viaje en varias oportunidades de al menos cuatro parlametarios. A pesar de que el trámite no era muy complicado, y había predisposición total del intendente de Morón, jurisdicción dónde se encontraba el cementerio dónde yacían los restos del Saltarín Rojo.
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